El Centro Superior de Estudios Teológicos «San Pablo» y la Congregación de los Santos Patronos Ciriaco y Paula organizan un ciclo de conferencias para ahondar en la figura de los mártires desde una perspectiva histórica y evangélica.
Las conferencias son los días 1, 2, 8 y 9 de junio, a las 20.30 horas en la iglesia de los Santos Mártires. Como expresa Rafael Vázquez, subdirector del Centro Superior de Estudios Teológicos San Pablo, «este ciclo se enmarca dentro de las actividades de extensión del CESET San Pablo. Nuestro Centro de Estudios quiere así prestar un servicio a la tarea formativa de la Diócesis en todos los campos y ser un apoyo para todos los que deseen promover la formación».
El 1 de junio, la catedrática emérita de Historia Moderna de la Universidad de Málaga Dra. Dª Marion Reder Gadow hablará sobre «San Ciriaco y santa Paula: historia y tradición en la ciudad de Málaga». Ella misma expresa que «cerca de la fecha en que sufrieron el martirio los patronos, hemos querido acercar a los malagueños a su figura no solo desde el punto de vista histórico, sino también teológico. Por mi parte, mi deseo es hablar sobre los patronos, por qué lo son de Málaga, desde qué fecha, cómo se celebraba su celebración, cómo era junto con el Corpus la fiesta más señalada y que luego el tiempo fue relegando al olvido». En palabras de esta historiadora, Ciriaco y Paula «deberían ser como san Fermín para Pamplona, o las santas Justa y Rufina para Sevilla; un referente, santos emblemáticos. Queremos que la gente los conozca, los valore y los sienta como patronos, no sólo de la ciudad, sino de los malagueños. De ahí pues que esa es mi principal misión, destacar la importancia que tuvieron y acercar a la historia».
El 2 de junio, el Rvdo. D. Andrey Kordochkin, sacerdote de la Catedral Ortodoxa del Patriarcado de Moscú en España, hablará sobre los «Santos Comunes: el ecumenismo del martirio». En su alocución, el P. Kordochkin hablará sobre los mártires comunes de la Iglesia Ortodoxa y la Católica, ya que la primera asumió todos los santos del calenario antes de la escisión, es decir, hasta el año 1054. Kordochkin lo tratará «con una referencia especial de los mártires en Cordoba y su relevancia en el día de hoy. También, sobre el martirio en la Iglesia en Rusia, «en el sentido más amplio de la persecución, también por el Estado, y la situación del día de hoy», explica.
El 8 de junio, el Rvdo. D. José Emilio Cabra, doctor en Teología Espiritual y profesor del CESET San Pablo, trata sobre la «Santidad y martirio en nuestros días». Como él mismo cuenta, «el papa Francisco afirma: «La santidad es vivir en unión con él los misterios de su vida […]. Se mide por la estatura que Cristo alcanza en nosotros, por el grado como, con la fuerza del Espíritu Santo, modelamos toda nuestra vida según la suya» (GE 20.21). La santidad consiste en «parecernos a Jesús», es el trabajo que el Espíritu Santo va haciendo en nosotros para que reflejemos el rostro del Hijo. Y ese parecido se hace más claro, más transparente, cuanto más nos damos. Jesús mismo dijo que «nadie tiene amor más grande que quien da la vida por los amigos» (Jn 15, 13). El martirio cruento ⎯pero también ese morir cotidiano a nosotros mismos, la entrega del día a día— va acuñando en nosotros los rasgos de Jesús».
El 9 de junio, la catedrática emérita de Historia del Arte de la Universidad de Málaga, Dra. Dª Rosario Camacho, se centra en «La iglesia de los Mártires: arte y religión». Esta profesora explica que va a tratar de «las transformaciones que sufrió la parroquia de los Mártires, desde su fundación en 1490, como una iglesia gótico-mudéjar de tres naves, a la ampliación que tuvo en el s. XVIII, promovida por la Hermandad del Santísimo Sacramento, al agregársele un amplio espacio en la zona de la cabecera, que funcionó como capilla sacramental y Martirium. Esta imagen está señalada por la dedicación a los Santos Mártires y a Jesús, Mártir del Calvario, y su presencia en la Eucaristía, lo que corrobora la iconografía que se distribuye por toda la iglesia envuelta en sutiles ornamentos del rococó».
Como continúa explicando Marion Reder, «en la sociedad estamos poco sensibilizados al sacrificio y nos dejamos llevar por una vida cómoda. Ver hasta qué punto estos jóvenes, Ciriaco y Paula, fueron capaces de renunciar a su futuro, al proyecto de su vida, con tal de no renunciar a su fe en Cristo. Por esto, perdieron la vida. Hoy en día, lamentablemente, vemos que hay muchos jóvenes sin horizonte, y por eso creemos que es importante ver lo que la fe en Cristo nos ofrece. El testimonio de los mártires patronos de Málaga es muy importante, también los que siguen existiendo en la actualidad, el testimonio de muchos mártires actuales, incluso el propio diácono que murió en Algeciras, que se enfrentó para defender un lugar sagrado y a los fieles. Para mí también es una forma de defender la religión de Cristo», concluye.
